Las condiciones en las que los niños pasan sus largas jornadas laborales son precarias. La falta de higiene y el ambiente hostil es su pan de cada día.
Imágenes que han salido a luz y que causan mucha polémica por tratarse de niños chinos atados con cuerdas a los barrotes de los centros de trabajo de sus padres para que no se pierdan por la ciudad.
Y es que millones de chinos no pueden costearse una guardería y muchos de ellos dejan a sus hijos solos en casa. Pero por miedo a que éstos se pierdan, hay algunos que se los llevan a sus centros de trabajo.
Hace unos meses fue muy polémica la imagen de un niño chino atado a una farola con una cadena. Aqui la foto insólita.